GAGV aboga por leyes de armas fuertes y efectivas que dificulten que los delincuentes obtengan armas, mantengan las armas de guerra fuera de las calles y fuera del alcance del crimen organizado, las pandillas y los tiradores masivos, y prevengan la violencia armada de todo tipo. Las leyes de armas débiles habilitan a los delincuentes y causan las muertes y lesiones a personas inocentes. Y las leyes de armas débiles permiten y facilitan el tráfico transfronterizo de armas que causa violencia en otros países y regiones.
La defensa de leyes de armas estrictas es una parte fundamental de las soluciones a la violencia armada global. Las soluciones incluyen:
- Verificaciones universales de antecedentes para todas las ventas de armas;
- Prohibiciones de armas de asalto de estilo militar, rifles de francotirador y cargadores de alta capacidad para civiles;
- Licencias y registros para propietarios de armas de fuego
- Prácticas obligatorias de venta y distribución seguras, incluidas la prevención de compras en bulto o ventas fraudulentas
- Dispositivos de seguridad obligatorios que pueden evitar disparos no intencionales o no autorizados;
- Regulación y supervisión estrictas de los comerciantes de armas, con prácticas de venta seguras y obligatorias y revocación inmediata de los privilegios de venta para los comerciantes irresponsables.
La ratificación y aplicación de tratados y protocolos internacionales efectivos que previenen la violencia armada es una parte importante de la solución global a la violencia armada.